Conductas de autoestimulación en el autismo.

El comportamiento autoestimulatorio es una de las mayores características en el diagnóstico del Autismo.  La autoestimulación es repetitiva,  es un comportamiento tipificado que no parece servir para ninguna otra función que la gratificación sensorial. Se debe reducir porque 1) interfiere grandemente con la atención; 2) Es altamente reforzante lo que compite con los refuerzos de adaptación y 3) Es estigmatizante por cuanto el entorno se enfoca en el comportamiento del individuo. Esto interfiere con el aprendizaje y se torna difícil motivar para que se reduzca ese comportamiento.

TIPOS DE AUTOESTIMULACION

 

1. La autoestimulación puede involucrar cualquiera de los cinco sentidos y tomar muchas formas.  El movimiento del cuerpo es una de las mayores categorías. Esto incluye el balanceo,  aplausos con las manos,  dar vueltas.  El movimiento de manos se une a la estimulación visual.  Mirar al vacío sin concentrarse no es más que una forma pura de autoestimulación visual,  es como observar las cosas a través de los espacios entre los barotes de una cerca.

2. Otra categoría sería el utilizar objetos para suministrar entradas sensoriales.  Voltear objetos,  reorcer una cuerda, hacer girar objetos,  utilizar objetos inapropiadamente y el uso repetitivo de objetos es otra forma de autoestimulación.

3. Un tercer tipo de autoestimulación es el de rituales y obsesiones:  Alinear objetos,  sostener objetos,  utilizar la misma ropa,  resistencia a variabilidad del entorno (muebles por ejemplo),  obsesión al hablar del mismo tema,  cerrar puertas,  etc. Con frecuencia involucran reglas que el niño ha desarrollado e insiste en continuar y hacer que las otras personas las sigan.

Cuando estamos aburridos podemos utilizar formas de autoestimulación,  mover el pie,  retorcerse el cabello, jugar con un lápiz.  La diferencia es que una persona normal está en capacidad de continuar atendiendo pues el comportamiento de autoestimulación es muy sutil y no se nota tan inapropiado,  igualmente tenemos unas reglas sociales que nos limitan las reacciones negativas.

Estas conductas autoestimulatorias ocurren en el niño con autismo en situaciones aburridas o estresantes y llega a ser tan intensa la sensación que bloquea el dolor.  Con frecuencia es similar a los comportamientos adictivos: distorsiona la atención y se alimenta de sí misma,  esto hace que el niño experimente retraso en el aprendizaje y el encierro en su propio mundo se intensifica. Razones que hacen crítico ejercer control sobre este comportamiento.

FUNCIONES DELA AUTOESTIMULACION

Como el nombre lo indica la función primaria de éste comportamiento generalmente sirve para proveer estimulación.  Mientras que la mayoría de los niños juegan con juguetes o buscan a otras personas espontáneamente,  los chicos con autismo prefieren concentrarse en la autoestimulación si no se les provee de otras actividades más constructivas.Otra posible función es la de reducir la frustración y el estrés.  Por ejemplo,  durante transiciones, en situaciones caóticas o durante la presencia de respuestas incorrectas,  se observará la utoestimulación.

También puede servir como señal para que otros reduzcan las exigencias o suministren asistencia.  Por lo tanto,  la autoestimulación deberá ser vista como una forma de adaptación que utiliza el niño desde su perspectiva.

Con el tiempo la autoestimulación se torna más y más fuerte.  Por consiguiente se vuelve extremadamente difícil de contener o suprimir. En niños menores es más sencillo que en jóvenes.  Ambos grupos pueden beneficiarse de pulir la autoestimulación transformándola en comportamientos más acordes y típicos.

INTERVENCION

IGNORAR SISTEMATICAMENTE

El niño se sentirá más feliz si se le ignora,  ya que él podrá concentrarse en su autoestimulación sin ninguna distracción.  Cualquier interferencia a ese comportamiento no será bien recibida,  ya que lo estamos privando de la situación estimulante. Las personas piensan que al ignorar la conducta ésta se va a extinguir. Pero rara vez es efectivo tanto como el castigo que puede desencadenar en más autoestimulación.

2. REFORZAMIENTO

Se deben utilizar refuerzos que motiven al niño a involucrarse en otras actividades distintas a la autoestimulación.

3.  PREVENCION ALA RESPUESTA

Detener el  comportamiento tan pronto como éste ocurra,  reducirá o inclusive eliminará el refuerzo,  ya que la autoestimulación en si es autoreforzamiento.  Entre más pronto sea bloqueado el niño pasará menos tiempo autoreforzándose.

Es aconsejable utilizar un método menos directo  PAUSA – MIRADA – EXPRESION FACIAL – GESTO,  para llegar al más directo en caso necesario MOVIMIENTO FISICO PARCIAL – MOVIMIENTO VERBAL FISICO TOTAL.

En la medida en que el procedimiento sea más indirecto,  es más factible que el niño sea consciente y es menos probable que exista la necesidad de utilizar control externo.  A pesar de que la autoestimulación no es motivada por la atención es importante utilizar el método menos directo para que la atención no refuerce el comportamiento. Igual evita luchas de poder que incitan a la resistencia y a la autolesión.

Además de lo anterior utilizar medios indirectos evita llamar la atención en sitios públicos. Pero inicialmente se puede llegar a necesitar ayuda física ya que el procedimiento indirecto en un momento dado no funcionó;  sin embargo, el objetivo es desvanecer la ayuda física.  Una vez que se detiene el comportamiento se debe dirigir al niño hacia la actividad apropiada y reforzar de acuerdo al tiempo que permanezca sin autoestimularse.

CONTROL DE ESTIMULOS

El propósito es crear ambientes y situaciones que eliminen la posibilidad de estas conductas.  Esto se puede lograr estableciendo lugares u horas del día donde se le permita este comportamiento. El objetivo es continuar reduciéndolas pero mostrándole al niño que tiene control sobre dichas autoestimulaciones. Darle a entender inicialmente que no se le permite bajo ningún concepto autoestimularse desencadenará que la conducta se incremente por el grado de ansiedad que esto le produce.

SUGERENCIAS PRACTICAS

Enseñar comportamientos alternativos adecuados.

  • El juego o las actividades recreativas que tienen fuertes componentes sensoriales pueden ser formas de establecer comportamientos de reemplazo.
  • Enseñar habilidades para enfrentar la frustración reduciendo situaciones que la propicien.
  • Fomentar habilidades comunicativas,  pues algunos niños se autoestimulan cuando no saben qué responder.  Enseñándoles que expresen lo que sienten ya sea en forma verbal o no verbal ayudará a reducir tangiblemente la autoestimulación.
  • En la medida en que se gane control sobre la conducta estimulativa de forma efectiva,  se necesitará aumentar el tiempo y las circunstancias durante las cuales se intervendrá.  Quisiéramos eliminarla por completo y ya! Pero la mejor forma es donde el niño y nosotros tengamos éxito.
Tomado de: Esperanza para el autismo (Leaf-McEachin)

4 comentarios en “Conductas de autoestimulación en el autismo.

  1. Luz Rengifo.

    Los comportamientos autoestimulatorios o estereotipias no son propios de autismo, su principal función es buscar entradas sensoriales (autoestimularse), también tiene otras funciones que son operantes y que han sido inadecuadamente reforzadas por el entorno, estas funciones pueden ser evitar o escapar a una tarea, llamar la atención, comunicar algo, por demandas, es un mismo comportamiento pero con diferentes funciones y es por eso que es importante hacer un Análisis funcional de esa conducta para hacer el manejo adecuado y utilizar el procedimiento correcto. (ABA).

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